divendres, 6 de març del 2015

Actividades culturales y artísticas

Las actividades culturales y artísticas son herramientas muy útiles para trabajar en  acción social ay que, a traves de ellas creas un espacio en el cual poder reflexionar sobre la realidad para comprenderla y luego transformarla. Estas actividades tienen una herramienta integradora y relacional creando, como ya hemos dicho anteriormente, un espacio de exploración, reflexión y comprensión.

Un ejemplo de estas actividades culturales y artísticas es el teatro, la fotografía o la música.

"En la medida que somos creativos nuestra calidad de vida mejora" los problemas cotidianos también son susceptibles de poder resolverse de una forma creativa, si conseguimos desarrollar esa parte de nuestra capacidad intelectual no solo nos servirá para ser artistas sino que lo aprovecharemos en los diferentes ambitos de nuestras vidas. Las actividades solo son una "escusa" para desarrollarla.



Estas actividades pueden enfocarse de diferente manera y obtener diferentes resultados en los y las participantes, por ejemplo. En mi pueblo (Jérica, Castellón) se habilitó una antigua iglesia en la cual continuamente hay exposiciones con diferentes técnicas de pintura que muestran todos los rincones del pueblo que el pintor o la pintoras deciden que son dignos de mostrarse cara al público. Por mucho que los artistas que participen sean personas de ese municipio lo que se valora en esas exposiciones es la obra finalizada. Se me ocurre que quizá en vez de realzar siempre las partes bonitas del pueblo, evitando reflejar en la imagen la suciedad que hay en ese rincón o lo descuidado que está el trozo de montaña que continua esa imagen podría organizarse una actividad en la cual se muestre la realidad de ese pueblo. En la cual cada ciudadano y ciudadana de cualquier edad, con cualquier nivel de conocimiento de fotografía, con cualquier calidad de foto hiciera una crítica a las partes descuidadas del pueblo, no pintar solo lo que interesa y lo demás obviarlo... de esa forma nos haría reflexionar sobre la realidad tanto a los que participan en la exposición como a los que van a verla. Quizá no tendría el contenido de la exposición un valor artístico tan alto como las exposiciones que se muestran ahora, pero si tendría un valor social de crítica, de reflexión y de transformación. Lo importante no será el resultado artístico sino el proceso y el efecto.